¿Cómo Motivar a un Golfista Juvenil?
Durante años hemos conocido a un montón de chavos golfistas y sus papás. Y vaya que hemos oído de todo tipo de opiniones y comentarios. Aunque estamos seguros de que los papás tenemos las mejores intenciones, a veces es un verdadero reto saber qué decirles a nuestros hijos después de jugar nueve hoyos o después de una clase.
Aquí te van algunas ideas para que tengas éxito guiando a tu golfista juvenil:
SIEMPRE: Deja que tu hijo aprenda a su ritmo.
Los entrenadores de golf, lo que hacen es fijarse bien en qué es lo que el golfista capta o con qué se hace bolas, y ajustan de acuerdo a eso. Como padre, nos caería bien reconocer las limitaciones y apoyar en lo que se pueda. Pero eso no quiere decir que nuestros hijos no avancen; quizás solo necesita ver las cosas desde otro ángulo para entender mejor. Si se tarda más de lo que crees que debería, ¡no te angusties! Algunos de los mejores golfistas que hemos conocido empezaron justo así.
NUNCA: No resuelvas los problemas por él/ella.
Si controlamos todo el proceso, los muchachos se va a acostumbrar a depender de nosotros, del entrenador de golf o hasta de sus amigos golfistas. Por ejemplo, hemos visto casos de jóvenes golfistas cuyos papás no les dieron esa independencia, y cuando el joven hace un mal tiro en el campo, lo primero que hace es voltear a ver a sus papás buscando una explicación. Busca una reacción de sus papás antes de pensar por sí mismo. Esto evita que entienda la situación por su cuenta, y luego necesita que alguien más le resuelva el problema. Nuestra meta como entrenadores y papás es fomentar esa independencia para que el joven empiece a confiar en su propia habilidad para solucionar problemas.
SIEMPRE: Felicita el esfuerzo y el trabajo.
Muchas veces los papás no tenemos ni idea de qué decir durante un evento o después de un entrenamiento. Los psicólogos nos dicen que lo más motivador que puedes decir es: «Me gusta verte jugar».
Te animamos a que elogies las habilidades que quieres que desarrollen, como la perseverancia, la capacidad de resolver problemas, el esfuerzo y una actitud positiva. Si solo felicitas el «ganar», el joven se puede sentir bajoneado, pero cuando reconoces el esfuerzo y la constancia, entonces lo importante se convierte en el «proceso», no necesariamente los «resultados».
NUNCA: No critiques al joven.
Si alguna vez has jugado golf, sabes lo frustrante que puede llegar a ser. Es sabido que muchos jóvenes dejan el golf porque no les gusta sentir que están decepcionando a sus papás. Si no los criticas y mejor elogias el esfuerzo, seguramente verás a un joven que se recupera rápido después de la mayoría de los retos.
Ser papá o mamá de un joven deportista es complicado. Parece que hay mil maneras de meter la pata. Mejor deja que el juego sea el mejor maestro para tu hijo, y confía en que tanto el entrenador como el juego le darán la retroalimentación que necesita para mejorar.
Fuente: Operation 36 Golf
BUENGOLF.MX 
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